Ya se acerca Noviembre… Y cada que se acerca Noviembre me da miedo porque es la señal inequívoca que el año ya no se fue.
Noviembre siempre ha sido un mes “inexistente” para mi. En todos los años de mi vida (o al menos los que yo recuerdo), Noviembre siempre se me ha ido como Agua que pasa por el río… Por una parte me gusta que Noviembre se vaya volando, porque después viene Diciembre, el cual para ser sumamente francos es el mes que mas disfruto (está ese frio que me tiene titiritando pero que tanto disfruto, convivo mas con mi familia, se acercan las fiestas navideñas que tanto disfruto, revaloro lo hecho en un año y se acerca mi cumpleaños obviamente!!). Noviembre solía disfrutarlo… Hace un año que Noviembre siempre ha sido particularmente difícil para mi, pues siempre significan retos, pero también el recordatorio de que cada Noviembre significa un año mas en esta faz, y eso ya es ganancia.
Ya estoy harto de estar triste todo el tiempo… creo que ya está pasando la tempestad. Aún sigo llorando todas las noches (a que muy pocos lo saben, ehh??), pero al menos ya estoy aprendiendo a vivir, a dejarme llevar, a sonreír aunque sea un poquito. Disfruto cada día de la vida como si fuera el último. He pasado de la fase del “por qué?” al “Qué?”… Ya no le cuestiono al señor “Por qué yo?”, “Por qué esta prueba?”, “En que te fallé para que me ‘castigues’?”… No, ya no me hago esas preguntas… Ahora todos los días le pregunto “A donde quieres que vaya?”, “A quien quieres que acuda?”, “A quien quieres que ayude?”, “A quien deseas tu que me alíe?”, “Cuál es el camino que quieres que tome?”… Estoy aprendiendo a vivir de nuevo, a respirar de nuevo, a soñar de nuevo, a descubrir de nuevo, a creer de nuevo…
Ya me harté de estar siempre triste. Ya me harté de siempre mostrar una sonrisota cuando por dentro estoy que me lleva el diablo. Ya me harté de vivir de falsedades. Ya me harté de estar siempre solo. Ya me harté de no disfrutar cada instante que el de arriba me está regalando, que me está brindando, que me está apoyando… Ahora tan solo debo aprender a vivir mas desenfadado, menos atiborrado… Debo aprender a soñar, a compartir, a vivir, a soñar, a reír, a querer, a quererme, a despejarme, a ser…
Se viene una época difícil para mi, pero como diría mi niña Alice: “No hay nada en esta vida que no puedas lograr. Todos las piedras en el camino son obstáculos que te encuentras para demostrarte a ti mismo que puedes saltarlas o incluso sacarlas de la vía… No hay reto que no se pueda conquistar”… Solo quiero aprender a aprender de nuevo, asomarme a ver que tal sigue el mundo… He disfrutado mi caparazón y me ha encantado mi nuevo escondite… Tan solo sería bueno saludar un poco al mundo exterior para saber que buenas nuevas hay allá afuera… A lo mejor las cosas son menos pesadas de lo que yo creo que son…
Por lo mientras sigo caminando… Espero señales… Quiero señales… Exijo señales…
Dedicado a aquellos que nos estamos reencontrando. Dedicado a los que han decidido ver el mundo exterior después de un largo rato en su mundo interior. Dedicado a la introspección. Dedicado al aprendizaje, ese que no debemos perder nunca, ese que nos caracteriza como seres humanos que somos…
