DEL AMOR Y OTRAS CUESTIONES

Hoy leía en una artículo que salió en el Portal de la UNAM que las relaciones amorosas que se construyen en México suelen ser de origen destructivas. Es un tema que pienso abordar mucho aquí, pero me saltó a la mente una frase que encontré en ese mismo artículo que sin duda me impacto demasiado:

En opinión de Gustavo Ortiz Millán, el amor es una emoción que no se da en un estado puro, pues se acompaña de sentimientos como el miedo, el odio, el resentimiento, la indignación, el arrepentimiento, la tristeza, la alegría, los celos y la esperanza, entre otros

¿Es el amor entonces una especie de estado mental insano?

Cuando amamos (o creemos amar), nos dejamos atrapar por nuestros sentidos. Idealizamos a la persona, la elevamos a la enésima potencia, ponemos todo para estar contentos con dicha persona y no vemos mas allá de nuestras narices que no sea la persona amada.

Y es cuando viene lo que el mismo Dr. Ortíz Millán dice: se mezclan otros sentimientos que son inevitables y que nos producen cierto desequilibrio emocional. Tenemos miedo de perder algún día el amor de ese alguien, odiamos cuando hace cosas que no nos agradan, nos da resentimiento cuando decimos ese comentario que tal vez no debíamos haber mencionado, nos indigna que alguien lastime a nuestra pareja, nos da tristeza saber que el otro sufre por x o y causa, nos da alegría el ascenso del ser amado, nos da celos cuando visita a esa persona que sabemos (o creemos) que el fin que busca el “amigo” no necesariamente es una “bonita amistad”…

Y nos cegamos por los famosos sentimientos. Nos volvemos inestables. Estamos melancólicos, o estamos eufóricos, o estamos tristes, o estamos enormemente felices, o estamos hiperactivos, o estamos muy débiles. El asunto es que cuando uno esta enamorado, no puede discernir las cosas fácilmente.

Es increíble entonces pensar que un estado que el mismo ser humano considera como “sublime y mágico” pueda desencadenar tantas cosas no tan bonitas que digamos.

Por amor se ha llegado a matar e incluso a matarnos a nosotros mismos. Por amor se han hecho batallas colosales en todo el mundo. Por amor se han construido palacios e incluso por amor se han realizado grandes sacrificios. El amor en si mismo es un estado insano, un profundo desequilibrio mental, un mecanismo que el ser humano se inventó para no aburrirse tanto, y un estado del cual los psicólogos se han valido para sacarnos una muy buena lana.

El problema mas grave es que si no estamos enamorados viene otra especie de melancolía por “estar solos”, por no . tener la chispa de ese alguien mas. Y viene otro enorme problema cuando se ha probado el estado de enamoramiento y nos encontramos en una fase en la que no lo estamos pero alguna vez lo estuvimos. Aún cuando sabemos que no es sano, aún así queremos volver a caer en la engañosa trampa… engañosa quizá porque creemos estar mal, cuando enamorados podríamos estar peor.

Amor, amor, amor… Cuan difícil es el tema. Si no lo estamos, nos sentimos mal. Y si lo estamos, nos sentimos bien pero estamos desequilibrados emocionalmente. ¿Qué es lo mas adecuado y sano para nuestro cerebrito? ¿La melancolía de no tener a nadie o el desequilibrio que causa en si el estado amoroso? ¿Qué preferiría usted?

Por cierto… considérenme insano mental y métanme al hospital Psiquiátrico!

Dedicado a los locos que estamos enamorados y que aún duelen muchas cosas. Dedicado al amor mismo que hace de las suyas. Dedicado a los insanos mentales.